Resumen: El comercio mundial agroalimentario presenta las mayores distorsiones y conflictos entre países porque en su funcionamiento se han soslayo persistentemente las normas y disciplinas del GATT. La política proteccionista de los países desarrollados ha conducido a que éstos pasaran en dos decenios de ser importantes a exportadores netos de alimentos, con excedentes acumulados que perturban los flujos tradicionales del mercado mundial.