Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación

Introducción

La gravedad de la sequía 2004-2006, el papel del regadío como gran consumidor de agua y la necesidad de dar respuesta a las actuales sensibilidades sociales y ambientales, propiciaron la redacción y aprobación del Real Decreto 287/2006, de 10 de marzo, conocido como "Plan de Choque de Regadíos". A través de este Plan, declarado de urgencia, los anteriores ministerios de Transición Ecológica y Reto Demográfico y de Agricultura, Pesca y Alimentación propusieron un conjunto de actuaciones en materia de mejora y consolidación de regadíos sobre una superficie de 866.898 hectáreas para obtener un ahorro de agua estimado de 1.162 hm3.

El Plan de Choque constituyó un referente para la moderna planificación de regadíos, tanto por los objetivos planteados como por los instrumentos implicados en su consecución.

Justificación del Plan

El año hidrológico 2004- 2005 fue el más seco desde que se tiene información sistematizada sobre precipitaciones en España. La reserva hídrica a mediados de enero de 2006 se situaba en 14.340 hm3, dando lugar a una disminución de cerca de veinte puntos porcentuales en los recursos disponibles sobre la media de los últimos diez años. Ante la gravedad de la situación en cuanto a la disponibilidad de recursos hídricos y de su repercusión potencial sobre el sector agrario se hace imprescindible actuar de manera urgente en la modernización de regadíos. El 75% del uso de agua se destina al sector agrario, según datos del INE correspondientes a 2005, por lo que el mayor potencial de ahorro está, siempre que las posibilidades técnicas lo permitan, en conseguir disminuir la cantidad de agua necesaria para el riego.

Por otra parte, dado el tiempo transcurrido desde la puesta en marcha del Plan Nacional de Regadíos, se hizo necesaria una nueva orientación más acorde con las necesidades y sensibilidades actuales.

Todo ello unido al papel relevante del sector del regadío en la producción final agraria llevó a los ministerios de Agricultura, Pesca y Alimentación y de Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico a aunar esfuerzos de cara a conseguir un importante ahorro de agua y un uso más eficiente del mismo mediante la modernización de las instalaciones de riego de menor eficiencia hídrica, que garantice la producción agraria y minimice los efectos de la sequía.

Objetivos principales

Uno de los principales objetivos del Plan de Choque fue promover el ahorro de agua cambiando la imagen del regadío, de derrochador y contaminador, a gestor eficiente del agua y garante del medio ambiente. Para ello se pretendió optimizar el uso de agua disponible mediante actuaciones como son la modernización de los sistemas de transporte, distribución y aplicación del agua en parcela, la elección de cultivos con variedades menos exigentes en agua, o el empleo de recursos hídricos alternativos a los convencionales, como son las aguas desaladas y las aguas regeneradas.

El objetivo de estas acciones no solo se reduce a obtener un ahorro de agua en la zona objeto de actuación. Se considera necesario dar un paso más en la modernización de regadíos, incorporando a los regantes a la sociedad de la información a través de la implantación de modernas tecnologías de comunicaciones en el medio rural, para alcanzar una mayor eficiencia hídrica y económica del regadío.

Por otro lado, la modernización del regadío implica la creación de empleo de calidad, capaz de gestionar de otra manera el agua de riego, y el desarrollo de un potente sector de servicios ligado al sistema agroindustrial asociado al regadío. La diversificación de las características de empleo posibilita la participación de todo tipo de trabajadores, hombres y mujeres, lo que, sin duda, contribuye a fijar población y mejorar la calidad de vida en todas las zonas de influencia.

Organismos implicados

Para la financiación y ejecución del programa de actuaciones, el MAPA, responsable de las redes de distribución en baja, contaba con los fondos propios previstos en las correspondientes partidas presupuestarias contempladas en el capítulo VI de la Dirección General de Desarrollo Rural; los fondos del capítulo VIII (SEIASAS) y los fondos del capítulo VI mediante una encomienda a la Empresa de Transformación Agraria S.A (TRAGSA), medio propio instrumental de la Administración que procederá a la ejecución y prefinanciación de las actuaciones relativas a la construcción de obras de mejora y consolidación de regadíos.

Por su parte, el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico aportó los fondos propios previstos en las correspondientes partidas presupuestarias del capítulo VI de la Dirección General del Agua y de las Confederaciones Hidrográficas, destinados a las redes de distribución en alta. El régimen de financiación de estas actuaciones está sujeto a lo establecido en el artículo 114.2 del texto refundido de la Ley de Aguas. La financiación y ejecución de las obras implica a las Sociedades Estatales de Agua, conforme a lo establecido en su convenio de gestión directa y previa suscripción de convenios específicos con los usuarios de las infraestructuras.

Se consideró igualmente un factor fundamental, la participación de los sectores públicos afectados, en especial las Comunidades de Regantes, que así se involucran en el marco de las exigencias de la Organización Mundial de Comercio y en las últimas reformas de la PAC en la Unión Europea, adaptándose a las exigencias del Reglamento relativo a la ayuda al desarrollo rural (CE) 1.698/2005 del Consejo, para el periodo 2007/2013, aprobado el 20 de septiembre de 2005.

Inversión

La inversión total prevista en el Plan de Choque fue de 2.409 millones de euros - de los cuales 1.017 corresponden al MAPA y 1.392 al MITERD – en actuaciones de modernización de infraestructuras de transporte y distribución de agua de riego y de fomento del uso de los recursos hídricos no convencionales, estimándose un ahorro de agua para el conjunto de las actuaciones de 1.160 hm3/año y una superficie afectada de 866.898 ha. La financiación máxima con cargo a los dos Ministerios implicados, es de 1.873 millones de €, aportando los usuarios la diferencia hasta completar el total de la inversión proyectada.