Las interacciones entre tortugas marinas y pesquerías son a menudo un problema tanto para los pescadores como para las tortugas. Para encontrar soluciones, la colaboración entre pescadores, científicos y administración es necesaria.
Posiblemente el mejor ejemplo del ventajas de este tipo de cooperación coordinada lo encontramos con la problemática de las capturas accidentales de tortuga boba en el Mediterráneo español, donde el principal empuje tanto por solucionar este problema como por trabajar por la sostenibilidad pesquera surge en la propia flota de palangre.
La Secretaría General de Pesca, en colaboración con el Ministerio de Agricultura ,Pesca y Alimentación y el CRAM (Centro para la Conservación y Recuperación de Animales Marinos), dentro del marco de una campaña de sensibilización, ha editado una ficha plastificada de "Manejo y primera asistencia de tortugas capturadas accidentalmente" que ha sido remitida a las Cofradías de pescadores y a diversas OOPPs que reúnen entre sus afiliados a pescadores de palangre de superficie. Junto con esta ficha se han enviado diversas copias de la "Guía de Pescadores sobre el Manejo de las Tortugas Marinas", elaborada por el PNUMA junto con un "Manual para Profesores" de pescadores en este área.