El agua es un recurso cada vez más escaso, problema que está alcanzando niveles universales pero que históricamente afecta a países con climatología adversa, entre los que hay que contar la mayor parte del nuestro.
La utilización de aguas subterráneas palia, en las zonas de pluviometría escasa, la escasez de este elemento vital. Se hace imprescindible, por tanto, conservar la calidad de aquellas para incorporarlas a las crecientes necesidades de la población que de ellas depende.
Aunque exista una mayor posibilidad de contaminación de las aguas subterráneas por actividades industriales, también la agricultura puede ocasionar la contaminación de las mismas por vertidos, directos o indirectos, más probables estos últimos, si actividades como la aplicación de productos fitosanitarios o fertilizantes no se hace con la debida precaución y responsabilidad.
Aquí puede descargar los documentos de difusión de la condicionalidad acerca de la protección de aguas subterráneas frente a la contaminación por sustancias peligrosas. En ellos, se exponen los requisitos de obligado cumplimiento por parte de Administraciones Públicas, agricultores y ganaderos en relación con esta temática.
Para descargar el documento y ver la legislación relacionada, haga click sobre el icono que se muestra a la izquierda de cada título, en el cuadro que se presenta a continuación: