Resumen: En este artículo se examinan las tendencias generales de las relaciones entre la agricultura, las áreas rurales y la sociedad. Estas tendencias parecen ajustarse a una serie de cambios acumulativos entre la agricultura y el territorio rural. La situación del medio ambiente es más una consecuencia que una causa de este proceso, que conduce a la denominada «deslocalización» de la agricultura moderna. Sin embargo, los problemas ambientales también ponen de manifiesto la existencia de nuevas interdependencias entre las zonas rurales y las regiones a escala europea. Se argumenta que el futuro del campo europeo será mejor concebido y gestionado si se considera en el contexto de la actividad política y sociológica como un lugar vivo, como un hábitat para el conjunto de la población europea, y no como un área meramente productiva.