Resumen: La hoja de barbecho que alterna habitualmente con el cereal en las explotaciones andaluzas, conoce una evolución bastante rápida en los años sesenta. Una mejor comprensión de los fenómenos que definen esa evolución no es posible si no se conoce la incidencia de la costumbre de arrendar parcelas a colonos para la realización de cultivos tales como la remolacha y el algodón. El presente trabajo estudia, en dos casos concretos (grandes explotaciones de secano y regadío), el sistema seguido en este tipo de arrendamientos, su funcionalidad técnica y sus condiciones económicas. Se constata que los sistemas de arrendamientos anuales, o contratos circunstanciales, como fórmula de transición a nuevos umbrales de mecanización, coinciden, precisamente, con la época en que se producen significativas subidas salariales en la agricultura.