Resumen: El arrozal de las Marismas del Guadalquivir viene experimentando en los últimos años un considerable dinamismo espacial fundado en la alta rentabilidad del cultivo. Las favorables condiciones naturales y las características de la estructura agraria del sector han permitido un rápido cambio de variedades, adaptando la producción al marco comercial de la CEE. Por el contrario, el crónico déficit hidráulico, las relaciones conflictivas con los espacios naturales protegidos en los que se inserta y la falta de cohesión social son los principales problemas que le afectan.