Resumen: La ganadería ha sido quizás el sector más dinámico del conjunto agrario en las últimas décadas. La interrelación entre los sectores industriales y agropecuarios, puede contribuir a explicar el modelo de nuestro desarrollo ganadero. Con los actuales sistemas de producción animal, se han roto los moldes tradicionales al alterarse los tipos y el tamaño de las explotaciones, las técnicas de nutrición, los avances genéticos, los tratamientos sanitarios, la industrialización, tipificación y comercialización de los productos, etc. etc. Todo ello ha determinado profundas modificaciones en la estructura de la explotación ganadera, pero también estos cambios tecnológicos han supuesto nuevos comportamientos desde el punto de vista de la profesión, se han eliminado sistemas y explotaciones ganaderas tradicionales e introducido nuevos modelos en donde el profesional ha perdido el control real, tanto sobre la forma de producción como sobre el producto final obtenido, para transferirlo a los agentes que distribuyen o comercializan las materias primas o los productos terminados.