Resumen: Aborda el estudio comparativo de aquellos aspectos de interés general de la Seguridad Social Agraria. En cuanto al ámbito personal, o campo de aplicación de la Seguridad Social Agraria, la doctrina socio-solidaria exige el radical viraje ideológico que implica el abandono de la teoría del «seguro social» sólo para económicamente débiles, para proteger, sin discriminación alguna, a todos los sectores de la población rural. Respecto de la financiación, estimamos que el imperante principio psico-económico aconseja el régimen financiero de reparto, nutrido con fuertes aportaciones estatales: las del empresario, con el líquido imponible como base (aunque no única) de cotización, y cuotas meramente simbólicas del trabajador asegurado. Pilares dogmático-filosóficos de la prestación: «niveles en el progreso» o reducción al mínimo de oscilaciones sectoriales; generosidad en las condiciones de calificación; la indemnización como instrumento efectivo en la redistribución de la renta nacional.