Plataforma de conocimiento para el medio rural y pesquero
Publicación: Revista Española de Estudios Agrosociales y Pesqueros, 2011, 230:171-193
Título: Las Indicaciones Geográficas en la nueva cuestión agraria ¿A quién pertenece el Queso Cotija?
Palabras clave: Patrimonialización, pastoralismo, Indicaciones Geográficas, territorio, intensificación ecológica
Resumen: ¿Puede esperarse que las indicaciones geográficas ofrezcan una alternativa propicia a la implementación de un desarrollo territorial sustentable?. ¿Pueden contribuir las IG a la preservación de los patrimonios ambientales y cognitivos locales?. ¿Pueden aportar alguna respuesta a los desafíos que plantea el cambio planetario, cambio climático, crisis energética y alimentaria, especialmente en los países del sur?. Estas preguntas delimitan un campo problemático amplio y complejo que abordamos desde los enfoques de la economía patrimonial y en base a un análisis interdisciplinario que asocia agronomía y ciencias sociales. Nuestro planteamiento sigue una metodología inspirada en el concepto de intensificación ecológica. En primer lugar porque ésta noción marca una ruptura clara en la orientación del cambio tecnológico: la intensificación se aplica más a los recursos ecosistémicos que al trabajo. En segundo lugar porque pretende responder simultáneamente a una doble exigencia de incremento de la disponibilidad de alimentos y de preservación de los ecosistemas. Asentamos nuestro análisis en la trayectoria de calificación del Queso Cotija. No encaja el Queso Cotija en la línea actividad-producto en la cual se asientan las I.G. Procede de una articulación sistema productivo-productos asociados. A esta característica remite su atributo de queso pastoril: su anclaje territorial procede de la aplicación de conocimientos técnicos y relacionales que no permiten disociar la elaboración de los quesos de la cría de novillos o del cultivo itinerante del maíz. El Queso Cotija ha ganado una fama merecida que, de alimento rústico tiende a convertirlo en producto gourmet. Esta reputación recién ganada ha inspirado proyectos contradictorios y causado conflictos que ponen en tela de juicio la permanencia misma de los sistemas productivos locales.